Nuevos materiales de construcción: objetivo ahorro energético

  1. proyecto de nave industrial

La preocupación por mejorar los procesos productivos y reducir el consumo energético se hace más palpable cada día que pasa. Es evidente que resulta necesario mejorar el tipo de construcciones para reducir sus emisiones nocivas a la atmósfera. En este sentido, la tecnología BIM ya nos permite conocer cómo es el consumo de una determinada edificación a lo largo de su vida. A la hora de afrontar un proyecto de nave industrial, debemos tener en cuenta que el 35% de la huella de carbono de un determinado inmueble corresponde a la energía invertida en la construcción del mismo, una cuestión relevante en la lucha por preservar nuestro medio natural.

En este sentido, desde la Unión Europea se ha implementado un proyecto, denominado en BioBuild, con el objetivo de minimizar el consumo en la fabricación de materiales, procesamiento de los recursos, fase de construcción y transporte. En el marco de este estudio, se han desarrollado nuevos materiales, fabricados con biocompuestos, reduciendo a la mitad la energía necesaria en su fabricación en relación con los componentes más avanzados.

Desde Tekton queremos destacar que este proyecto, que finalizó hace algunos meses, ha marcado las bases para incrementar la eficiencia energética de cualquier construcción. Los resultados de este trabajo han sido un éxito, recibiendo el premio al producto más innovador de la construcción de los JEC Europe Innovation Awards.

El galardón recayó sobre unos paneles creados para la fachada de las edificaciones, fabricados a base de dos planchas de biocompuestos. Más concretamente, se componen de tejido de lino de Biotex y están impregnados en biopoliéster. Además, en función de las necesidades específicas de la edificación, se podrá elegir el color para el acabado final. Entre las dos planchas que componen los paramentos verticales, se colocará otro material que permitirá incrementar las condiciones de aislamiento térmico y acústico.

Estos nuevos materiales permitirán construir edificaciones mucho más sostenibles. Se estima que su vida útil alcanzará los 40 años, pero al final de su ciclo, podrán retirarse y reciclarse. Sólo de este modo, se mejoran las condiciones de los edificios, respetando el medio ambiente y mejorando el consumo energético. A la hora de desarrollar un proyecto de nave industrial, estos nuevos materiales abren un mundo de posibilidades para conseguir construcciones menos contaminantes y más eficientes, sin duda, todo son ventajas.

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