Procedimientos constructivos: la revolución de los prefabricados

  1. naves industriales prefabricadas

Las naves industriales prefabricadas presentan numerosas ventajas frente a la construcción tradicional de este tipo de edificios. La optimización de estas edificaciones se ha conseguido mediante la elaboración de sus techos con materiales metálicos, en detrimento de las armaduras tradicionales. La elaboración estandarizada de estos componentes permite fabricar marcos de diferentes longitudes. Esta sistematización en la elaboración de los marcos metálicos permite que el proceso sea mucho más eficiente, reduciendo considerablemente el coste del proceso.

La fabricación en serie de los diferentes componentes supone un ahorro considerable en la composición de estas partes básicas en la construcción. Pero, además de la estructura metálica, la prefabricación de otros elementos relevantes como los muros de contención también aporta beneficios para la ejecución final de la construcción. Desde Tekton queremos señalar las bondades de la construcción industrial prefabricada:

  1. Incremento de la calidad: Las máquinas empleadas en la estandarización de las diferentes piezas permite mejorar la calidad de los materiales. Los procedimientos de fabricación dan como resultado materiales más resistentes, minimizando el porcentaje del error humano en la ejecución de la obra.
  2. Se reduce el tiempo de ejecución: La obra se basará en una metodología de trabajo en cadena, sin ser necesario tiempos de espera entre cada fase. El plazo para la ejecución de la obra se reducirá notablemente.
  3. Se minimizan las fases de la obra: Con la utilización de naves industriales prefabricadas es posible prescindir de algunas fases engorrosas en la construcción de la edificación.
  4. Cualificación requerida: Los profesionales que se encarguen de la ejecución de piezas estandarizada, como los operarios que vayan a hacerse cargo del montaje deberán estar debidamente cualificados para poder llevar los trabajos a buen puerto. Lo cual es garantía de un trabajo de calidad, más profesionalizado.
  5. Menor coste: La ejecución de la obra resulta mucho más rápida y sencilla. Se produce una optimización entre las horas trabajadas por cada operario, se reduce el tiempo de ejecución y se eliminan diferentes fases de la construcción convencional que suponen un incremento en el precio final. La reducción del tiempo de ejecución supone un descenso considerable de los gastos finales.
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