Pasamos muchas horas en nuestro puesto de trabajo, tantas que casi podemos afirmar que el centro laboral es nuestra segunda casa. Al igual que en nuestro hogar, las condiciones de confort y salubridad del puesto de trabajo deben de ser adecuadas, sobre todo, porque cuando no lo son suele producirse un descenso acusado de la productividad. Actualmente, existe una normativa que regula la seguridad y la salud en el centro del trabajo, el Real Decreto 496-97, en el mismo podemos encontrar un apartado que trata, exclusivamente, sobre la climatización del espacio. Cuando se acomete la construcción de naves industriales, deberemos tener presente el tipo de actividad productiva que se va a ejecutar, se trata de una cuestión fundamental para la elección del sistema de climatización más adecuado.
Los sistemas de calefacción para edificaciones industriales son similares a los que podemos instalar en una vivienda o establecimiento comercial. Si bien es cierto que, generalmente, estas construcciones presentan un gran tamaño y unas condiciones específicas que hacen que el consumo energético, relativo a los sistemas de climatización, en estos espacios sea bastante elevado. Desde Tekton queremos destacar los principales sistemas de climatización a tener en cuenta en la construcción de naves industriales:
- Sistemas de rotación de aire: Es un sistema muy adecuado para su instalación en almacenes y centros de distribución. Siendo, igualmente, válido para edificaciones industriales donde sea necesario mantener un determinado producto a una temperatura específica y constante.
- Calderas de gas o gasóleo para uso industrial: Son sistemas de combustión de alto rendimiento, similares a los de uso doméstico o comercial. El gasóleo contribuye a un mejor rendimiento de la caldera y minimiza las labores de mantenimiento. Sin embargo, el gas es más limpio, ya que no genere ningún tipo de residuo. El principal inconveniente de este tipo de energía es que para climatizar espacios de grandes dimensiones será necesario un consumo energético elevado.
- Aire acondicionado: Desde luego, no es el sistema de climatización más habitual en las construcciones industriales, pero constituye una alternativa a tener en cuenta. Su utilización es sencilla, se selecciona una temperatura en el termostato y el aire saldrá frío o caliente para alcanzar esa temperatura en el interior de la nave. Su instalación es más habitual en espacios de oficinas.
- Calor radiante: Este sistema es altamente recomendable, teniendo en cuenta el tamaño de estos edificios y el uso industrial de los mismos. Mantiene la temperatura interior contante, evitando la pérdida calorífica ante acciones como: efecto de estratificación o apertura de puertas y ventanas, entre otras.
- Energías renovables: Evidentemente, lo más adecuado será contar con algún sistema de energía renovable, como las placas fotovoltaicas, la energía geotérmica o la biomasa. Este tipo de energía es más respetuosa con el medio ambiente y permite reducir en gran medida el consumo energético de estas instalaciones.