Una de las edificaciones más altas del mundo se encuentra en Kuala Lumpur, en Malasia, nos referimos a las Torres Petronas. Hablamos de una maravilla arquitectónica compuesta por dos torres gemelas, que simbolizan un distrito de negocios moderno en una ciudad en auge y económicamente pudiente. Estos edificios alcanzan los 452 metros de altura y cuentan con 88 plantas. El diseño de las torres se sometió a concurso, en el mismo participaron ocho estudios de arquitectura, pero el ganador fue el proyecto del arquitecto Cesar Pelli.
El diseño de las torres pretende evocar elementos típicos del arte islámico, prestando especial atención a la herencia musulmana que recibe el país malasio. La mayor peculiaridad que presentan estas edificaciones es su diseño geométrico, entrelazando dos cuadros. La apariencia exterior de las Torres Petronas se asemeja a una estrella de doce picos, incluyendo además un círculo en cada intersección.
Este hito arquitectónico presenta una estructura compleja, las Torres se asientan sobre una superficie de hormigón, pero debajo de ellas se encuentra todo un entramado de pilares que alternan materiales como hormigón y acero. En la construcción de estas edificaciones se decantaron por el uso mayoritario de hormigón en lugar de una estructura metálica, para evitar las vibraciones y oscilaciones en la parte alta de las torres. De cualquier modo, la estructura de hormigón armado se complementa con una fachada compuesta por acero y vidrio.
Desde Tekton queremos resaltar el impacto visual de estas torres, como elemento de diferenciación destacamos un puente que las comunica en la parte superior y que cuenta con unos 58 metros de longitud. El nombre de estas torres, Petronas, se desprende de la sigla que se utiliza para nombrar a la Corporación Nacional de Petróleo de Malasia.
La principal problemática de la construcción de esta obra arquitectónica fue conseguir mantener la verticalidad de las torres mientras se desarrollaban las obras. El resultado final de las Petronas combina elementos antiguos con un diseño moderno. El acero y vidrio utilizado en su exterior les confiere cierto aspecto de diamante tallado.
Curiosamente, las Torres Petronas no fueron diseñadas para ser las más altas del mundo, pero cuando el proyecto se estaba ejecutando se decidió incluir dos pináculos en la parte superior de las mismas, con lo que se superó la altura de la Torre Sears en Chicago, hasta entonces la más alta del mundo. El record de altura de las Torres Petronas se mantuvo hasta 1998 cuando se erigió el edificio Taipei 101 alcanzando los 509 metros de altura. De cualquier modo, la puja por construir el edificio más alto del mundo sigue vigente.