El sector de la construcción comienza su recuperación a paso lento, pero seguro. Aunque en el ámbito de la construcción industrial la crisis no ha sido tan aguda, el repunte de las ventas, construcciones y reformas es palpable. Durante todos los años que ha durado la conocida crisis del ladrillo, el sector ha buscado la manera de reinventarse. Todo parece apuntar a que la construcción de naves industriales de los próximos años será más eficiente y más respetuosa con el medio ambiente.
Los expertos señalan que la construcción de edificaciones a medio plazo responderá al levantamiento de edificios inteligentes, basándose en la aplicación de las nuevas tecnologías para su construcción y la utilización de los nanomateriales para mejorar la calidad de las construcciones. Muchos coinciden en que nos encontramos de frente con la tercera revolución industrial ante el surgimiento de la fabricación digital.
Desde Tekton queremos hacer hincapié en que la construcción del futuro sumará las nuevas técnicas de fabricación digital, el software que lo hace posible, la nanotecnología y la irrupción en el mercado de nuevos materiales. Modificando, en un corto espacio de tiempo, la construcción tal y como la entendíamos antes de estallar la crisis.
Aunque, todavía nos parecen cuestiones de ciencia ficción, lo cierto es que están más cerca de lo que parece. Este tipo de tecnologías son, cada vez, más accesibles. De hecho, se están llevando a cabo diversas labores de investigación y desarrollo de aplicaciones y materiales que permitan mejorar los procesos constructivos. Podemos definir todas estas acciones como una evolución innovadora y más ecológica para levantar edificios más ecológicos, menos contaminantes y con prestaciones únicas.
Los nanomateriales están posibilitando la creación de piezas que pueden limpiarse solas, también se están desarrollando materiales que purifican el aire. Por supuesto, se trabaja para mejorar las propiedades de los materiales convencionales, consiguiendo por ejemplo que se conviertan en ignífugos. Las energías renovables siguen ganado terreno para optimizar el consumo energético en la construcción de edificaciones de cualquier índole. Las nuevas tecnologías podrán detectar y corregir los posibles errores estructurales, mejorando así la calidad final en la construcción de naves industriales.
La recuperación del sector es palpable, pero estos años han servido para mirar al futuro con optimismo, reinventándonos y tratando de mejorar el resultado final.